Estudios de especialistas de las universidades de Oxford y de Pittsburgh confirman que el tener nalgas de gran tamaños previene la diabetes y distintas enfermedades cardiovasculares, además de contribuir al desarrollo intelectual.
Un grupo de científicos analizaron y compararon la grasa del abdomen femenino con la de las piernas y glúteos, y determinaron que ésta última, por su alto contenido de leptina, ayuda a metabolizar mejor los azúcares y el colesterol.
En el mismo sentido, otro grupo de investigadores de la Universidad de Pittsburgh determinaron que las chicas con cinturas finas y caderas enormes son más inteligentes que el resto.Ésto se debe a los ácidos grasos Omega 3 que se acumulan en nalgas y muslos y permiten un mejor desarrollo del cerebro y del sistema nervioso.
Sin embargo, no se puede hacer trampa: los dos estudios coinciden sostienen que no se trata de comer más, ya que el tamaño de grasas "buenas" en la cola viene determinado por genética.
Otro dato remarcable es que los hijos de mujeres caderonas son intelectualmente superiores que los hijos de madres flacas.